La automatización industrial está marcando un nuevo paradigma en el sector manufacturero y de servicios, impulsada por avances tecnológicos significativos en áreas como la realidad aumentada (AR) y la realidad virtual (VR). Estas tecnologías emergentes están redefiniendo los procesos operativos y de mantenimiento, ofreciendo soluciones innovadoras que mejoran la eficiencia, la seguridad y la productividad.
Realidad aumentada y virtual: Impulsores de cambio
La incorporación de AR y VR en la automatización industrial facilita una interacción más intuitiva y detallada con maquinaria y procesos. La la realidad aumentada (AR) permite a los técnicos visualizar información y datos operativos superpuestos en el entorno real, lo que mejora la precisión y reduce el tiempo de inactividad. Por otro lado, la VR se utiliza para la formación y simulación, permitiendo a los operarios entrenar en entornos virtuales seguros antes de interactuar con maquinaria real.
La necesidad de personal cualificado
A medida que estas tecnologías se vuelven más integradas en los procesos de automatización industrial, surge una necesidad crítica de personal cualificado que pueda navegar eficazmente estos avances. La educación y formación en AR y VR, junto con conocimientos sólidos en automatización, son esenciales para preparar a la fuerza laboral para los desafíos del futuro. Las empresas y las instituciones educativas juegan un papel crucial en el desarrollo de programas que atiendan a estas necesidades emergentes.
Mirando hacia el futuro
La automatización industrial, potenciada por la AR y la VR, representa un campo fértil para la innovación y el crecimiento. Sin embargo, el éxito en este entorno en evolución depende en gran medida de nuestra capacidad para cultivar y aprovechar el talento cualificado. La inversión en educación y formación especializada no solo es esencial para el desarrollo individual, sino que es fundamental para el avance y la competitividad de la industria a nivel global.
Locating the bores so they didn’t interfere with the building footprint was another challenge. The team successfully located 27 of the bores outside the footprint, with the remaining four bores falling underneath the building. Locating most of the bores outside of the building footprint kept the project on schedule, and limiting the number of bores beneath the foundation mat slab meant less impact to the deep foundation excavation activities.